Un hombre joven me llamó recientemente con motivo del movimiento de su familia hacía la Iglesia Ortodoxa. Me contó un precioso relato de como su hija de siete años les ayudó a su esposa y a él comprender una practica que es , para muchos, un obstáculo . A pesar de que la familia tenía íconos en su casa , aun se les hacía dificil comprender la práctica de besarlos . Una noche , después de las oraciones con su hija , ella miró fijamente al ícono en su recámara y preguntó,
“¿Quien esta en esos retratos ,papi ?”
Él respondió,
“ La Virgen María y Jesús . “
Levantó el ícono , lo besó y lo abrazó , exclamando ,
“¡ Oh , papi , te aman tanto!”
“Luego “, me dijo, “Entendimos que se trata todo del cariño.”
De hecho ,el amor es el corazón y alma de la teología de los antiguos Padres y de la Iglesia Ortodoxa. Los antiguos Padres de la Iglesia , tanto orientales como occidentales , compartían la misma perspectiva : la humanidad anhela la liberación de la tiranía de la muerte , el pecado , la corrupción y del diablo que es sólo posible por medio de la vida , muerte y resurrección de Jesucristo . Sólo, el advenimiento compasivo de Dios en la carne podía lograr nuestra salvación , porque , sólo él podía conquistar estos enemigos de la humanidad .
Es imposible para la Ortodoxia imaginar la vida afuera del amor global y gracia del Dios que vino , él sólo , para rescatar su creación caída .
Para los Padres de la Iglesia Ortodoxa , la teología se trata todo del amor.
El Planteamiento de los Padres Ortodoxos
Por dominante que el término “ pecado original “ se haya vuelto , puede venir a ser una sorpresa para muchos que era desconocido tanto en la Iglesia Oriental como la Occidental hasta la época de Agustín (354-430) . El concepto posiblemente surgió en las escrituras de Tertuliano, pero el término aparece por primera vez en la obra de Agustín . Anterior a esto los teólogos de la Iglesia primitiva usaron una terminología distinta que indicaba un modo distinto de pensar sobre el tema de la caída, sus secuelas y la respuesta de Dios . El término utilizado por los Padres griegos para describir la tragedia en el Jardín fue “ pecado ancestral “ .
Pecado ancestral tiene un significativo específico. La palabra griega para el pecado , en este caso , amartema , se refiere a un acto individual con la cual los Padres griegos asignaron responsabilidad por el pecado del Jardín sólo a Adan y Eva . La palabra amartía , el término más comun para el pecado significa literalmente “ no dar en el blanco “ y se usa en referencia a la condición común de la humanidad (Romanides, 2002).
La Iglesia Oriental a diferencia de la Occidental , nunca habla del paso de la culpabilidad de Adan y Eva a su prole , como hizo Agustín . Al contrario , se considera cada individuo responsable sólo por la culpa de sus propios pecados . La pregunta se vuelve, “ ¿En qué , pues, consiste la herencia de la humanidad de Adan y Eva , si no en la culpa ?” Los Padres Ortodoxos responden unánimes : la muerte . ( 1 Cor.15,21)
“El hombre nace con el poder parasítico de la muerte dentro de si” escribe el P. Romanides ( 2002, p. 161).
Nuestra naturaleza ,como enseña san Cirilo de Alejandría, se hizo
“ enferma… por el pecado de uno “ (Migne, 1857-1866a ).
No es la culpa que pasa sino la condición , la enfermedad ;para los Padres ortodoxos .
En el pensamiento ortodoxo , Adan y Eva fueron creados con una vocación : unirse progresivamente a Dios en su capacidad para compartir su vida divina- la deificación ( Romanides , 2002 , p. 76-77)
“ Tuvieron que madurar, crecer en conciencia por medio del desprendimiento de la voluntad y la fe , para llegar a una confianza amorosa en el Dios personal” (Clement, 1993, p.84)
Teófilo de Antioquía (segundo siglo) postula que Adan y Eva fueron creados ni mortales ni imortales . Fueron creados con la capacidad de llegar a serlo por su obediencia o su desobediencia ( Romanides,2002)
La libertad para obedecer o desobedecer les correspondía a nuestros antepasados más antiguos,
“Porque Dios los hizo libres y soberanos” ( Romanides, 2002 , p.32) .
Aferrarse a la vocación divina los traería vida , rechazarla les traería la muerte , pero no por la mano de Dios . Continua Teófilo,
Si guardase el mandamiento de Dios, sería premiado con la imortalidad… si , al contrario, se voltaría a las cosas de la muerte por desobedecer a Dios , sería la causa de su propia muerte” ( Romanides , 2002, p. 32)
Adan y Eva desobedecieron el mandamiento de no comer del arbol prohibido , rechazando a Dios y a su vocación de manifestar la plenitud de la existencia humana ( Yannaras , 1984). La muerte y la corrupción. comenzaron su reino sobre la creación.
“ El pecado reinó por la muerte .” ( Romanos 5,21)
En esta imagen la muerte y la corrupción no provienen de Dios ; ni las creó ni las pretendió . Dios no es autor del mal . La muerte es la consecuencia natural de darle la espalda a Dios .
Adan y Eva fracasaron por la tentación que aflige a toda la humanidad : ser autónomos , determinar su propio camino , realizar la plenitud de la existencia humana sin Dios. Segun los Padres ortodoxos , el pecado no es una violación de una ley impersonal o codigo de comportamiento, sin un rechazo a la vida ofrecida por Dios ( Yannaras, 1984). Este es el blanco al cual se refiere la palabra amartía . La vida humana caída es, más que nada, la falta de realizar el potencial dado por Dios a la existencia humana , que es, como escribe san Pedro ,
“ para que por éstos os hagáis participes en la divina naturaleza” (II Pedro 1,4).
San Basilio escribe:
La humanidad es un animal que ha recibido la vocación de covertirse en Dios” (Clement, 1993 , p. 76)
En el pensamento ortodoxo Dios no amenazó a Adan y Eva con castigos ni fue enojado u ofendido por su pecado; Fue conmovido por la compasión . La expulsión del Jardín y separación del arbol de la vida fue un acto de amor y no de venganza para que la humanidad no
“ se hiciera inmortal en el pecado” (Romanides , 2002, p.32)
Hací comenzó la preparación para la Encarnación del Hijo de Dios y la solución que sólo podía rectificar la situación : la destrucción de los enemigos de la humanidad y de Dios , la muerte ( I Cor. 15,26 , 56) el pecado , la corrupción y el diablo (Romanides , 2002).
Es importante anotar que la salvación como deificación no tiene nada que ver con el panteismo porque los santos Padres insisten en la doctrina de la creación ex nihilo (Atanasio , 1981) Los humanos como el resto de la creación entraron en existencia desde la nada. Los seres creados siempre se quedaran creados y Dios siempre se quedara increado. Sólo el Hijo de Dios cruzó ese abismo por su encarnación .
La himnografía ortodoxa con frecuencia habla de la paradoja de la unión de lo increado con lo creado sin ni mescla ni confusión en la maravillosa unión hipostatica . Por ejemplo, la natividad de Cristo se interpreta como “ una recreación secreta , por la cual la naturaleza humana fue asumida y restaurada a su estado original” (Clement, 1993 , p.41) Dios y la naturaleza humana , separados por la caída , se reunen en la persona del Cristo encarnado y ( la naturaleza humana) es redimida por su victoria en la cruz y por su resurrección mediante la cual la muerte es destruida. (I Cor. 15,54-55) .
En esta forma, el Segundo Adan realiza la vocación original y se invierte la tragedia del Primer Adan , abriendo paso a la salvación de todos.
La caída no logró destruir la imagen de Dios ; el gran obsequio regalado a la humanidad se quedó intacto , aunque dañado ( Romanides , 2002). Orígenes habla de la imagen enterrada como en un pozo atascado con escombros. ( Clement , 1993) .Mientras que la obra salvifica es conseguida por Dios por medio de Jesucristo, la extracción de los escombros que esconden la imagen en nosotros requiere de nuestra libre y voluntaria cooperación . San Pablo utiliza el termino sinergía , o colaboración, (I Cor. 3,9) para describir la cooperación entre la gracia divina y la libertad humana .
Para los Padres ortodoxos esto significa ascetismo ( oración , ayuno , caridad y mantenimento de vigilia) relacionados con la imagen paulina del atleta espiritual ( I Cor. 9, 24-27). Éste es el obrar la salvación
“ con temor y temblor “ (Filipenses 2,12).
La salvación es un proceso involucrando a la fe , la libertad y esfuerzo personal para cumplir el mandamiento de Cristo :
“ amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón , con toda tu alma y con toda tu mente , y amarás a tu prójimo como a ti mismo (Mat. 22, 37-39).
El gran himno de la Pascua Santa captura en pocas palabras la esencia del entendimiento ortodoxo de la Expiación:
“Cristo ha resucitado de los muertos , la muerte por su muerte hollando y a los que yacían en los sepulcros la vida dando” ( Pentecostario )
Debido a la victoria de Cristo en la cruz y en la tumba la humanidad ha sido liberada, la maldición de la ley se ha revocado , la muerte es asesinada y la vida ha amanecido para todos. Máximo el confesor (580-662) escribe que “La muerte de Cristo en la cruz es el dictamen de sentencia del juicio “ (Clement, 1993 p. 49) y por esto podemos regocijar en la conclusión tan bellamente expresada por Olivier Clement : “ En el Cristo crucificado se ofrece el perdón y se da la vida. Para la humanidad ya no es asunto de temer el juicio o de merecer la salvación sino de recibir el amor con esperanza y humildad” ( Clement, 1993 ,p.49).
El Legato de Agustín
La piedad y devoción de Agustín son en gran parte indiscutidas por teólogos ortodoxos , pero sus conclusiones sobre la Expiación , sí lo son( Romanides, 2002). Agustín , como él mismo reconoce , nunca aprendió como leer el griego correctamente y esto se volvió un estorbo para él . Parece haber dependido mucho de traducciones latines de los textos griegos . Su mala interpretación de un texto escriptural clave ( Rom. 5 ,12) sirve de ejemplo ( Meyendorff , 1979).
En el latin el modismo griego ef ho que significa “porque” fue traducido como en el cual . Diciendo que todos han pecado en Adan es distinto que decir que todos han pecado a causa de Adan . Agustín creó y enseñó que la humanidad había pecado en Adan ( Meyendorff, 1979, p.144). El resultado es que la culpabilidad reemplaza a la muerte como la herencia ancestral ( Agustín , 1956b). Por ende , el termino pecado original evoca la creencia que el pecado de Adan y Eva es no sólo la primera transgresión sino también la universal en la cual participa toda la humanidad .
Agustín , notoriamente discutió con Pelagio ( 354-418) sobre el lugar del albedrío humano en la salvación. Agustín adoptó la opinion contraria a él que sólo la gracia es salvífica , sola gratis ( Agustín , Sobre la Predestinación de los Santos, 7) . A partir de esto , se desarrolló una doctrina de predestinación ( Dios arbitrariamente otorga la gracia a quien quiere) que se endureció en los siglos 16 y 17 en la doctrina de la doble predestinación ( Dios ,en su soberanía , salva algunos y condena otros ). La doctrina de la Iglesia de los primeros siglos sobre la imagen y sobre el libre albedrío fue abandonada .
La idea romana de la justicia cobró prominencia con Agustín y la teología tardía occidental. La idea de que Adan y Eva ofendieron la infinita justicia y honor de Dios hizo de la muerte el método divino de retribución ( Romanides, 2002) Pero esta idea de la justicia desvia mucho del pensamiento bíblico . Kalómiros explica el significado de la justicia en el griego original del Nuevo Testamento:
La palabra griega dikaiosuni ‘ justicia’, es una traducción del hebreo tsedaka . La palabra significa ‘la energía que salva al hombre.’Es paralela y casi sinónima con la palabra hesed que significa ‘misericordia’ , ‘compasión’ , ‘amor’ y con la palabra emeth que significa ‘fidelidad’ , ‘verdad”. Esto es todo contrario al entendimiento jurídico de ‘la justicia’. ( p.31)
El punto de vista jurídico genera dos problemas para Agustín. Primero: ¿cómo se puede entender la mutabilidad de amor a ira del Dios inmutable? Segundo: ¿Cómo puede Dios , quien es bueno , ser el autor de un mal como la muerte? ( Romanides, 1992)
La única forma de responder a esto , como hizo Agustín al joven obispo Julián de Eclano , que la justicia de Dios es inescrutable ( Cahill, 1995 ,p.65)
Logicamente, pues, la justicia proporciona prueba de la culpabilidad para Agustín , porque , como toda la humanidad sufre el castigo de la muerte y como el Dios justo no puede castigar a los inocentes,luego todos son culpables en Adan . Por semejante razonamiento, la justicia parece ser un criterio al cual Dios es obligado ( Kalómiros, 1980) . ¿Puede Dios ser mutable o sujeto a cualquier criterio o necesidad?
Por contraste, el Padre ortodoxo, San Basilio el magno, atribuye el cambio de actitud, no a Dios sino a la humanidad (Migne, 1857-1866b) . Por los cimientos teológicos echados por Agustín y tomados por sus herederos , la conclusión parece ser inevitable que un cambio radical ocurre en occidente haciendo de la ira de Dios y no de la muerte el problema enfrentado por la humanidad .( Romanides, 1992, p. 155-156).
¿Cómo , pues, pudo ser la ira de Dios aplacada? La enseñanza de la Iglesia antigua no tenía respuesta porque sus adeptos no veian a la ira como problema . La Teoría de la Satisfacción , propuesta por Anselmo de Canterbury (1033-1109) en su obra Cur Deus Homo ofrece la respuesta predominante en occidente.
El pecado de Adan ofendió y enojó a Dios haciendo justificable el castigo de la muerte sobre toda la humanidad .
El antídoto para esta situación es la crucifixion del Hijo encarnado de Dios porque sólo el sufrimiento y muerte de un ser eterno igual podía satisfacer la ofensa al Dios infinitamente deshonrado y aplacar su ira ( Williams, 2002; Yannarás , 1984, p. 152). Dios sacrifica a su Hijo para restaurar su honor y pronunciar el sacrificio suficiete. La idea de la rectitud imputada nace de aquí. El entendimiento ortodoxo que
“la resurrección…por Cristo , abre para la humanidad el camino del amor que es más fuerte que la muerte” ( Clement, 1993, p. 87)
es reemplazado por una teoría jurídica de juzgados y fallos.
La imagen de un Dios iracundo y vengativo atormenta al Occidente donde existe una profunda inseguridad y culpabilidad . Muchos hasta aparentan mantener que la enfermedad , el sufrimiento y la muerte son la voluntad de Dios. ¿Por qué? Sospecho que una razón es porque en lo más profundo persiste la creencia de que Dios es todavía iracudo y tenemos que aplacarlo. Sí, en efecto , la enfermedad , el sufrimiento y la muerte llegan y cuando llegan la gracia de Dios los transforma en tribulaciones vivificantes , pero ¿son o no la voluntad de Dios? ¿Castiga Dios cuando le da la gana, cuando nuestro comportamiento le disgusta o por ninguna razón?¿ Las enfermedades que afligen a la creación , vienen de Dios?
Por ejemplo , ¿pudieramos decir que el sufrimiento del Hijo le dió gusto al Padre o el de los condenados en el infierno? ( Yannarás , 1984) Freud se rebeló en contra de tales ideas , llamando a tal dios un padre sádico ( Yannarás , 1984) . ¿Pudiera ser que el ateismo moderno es una rebelión sana en contra de una deidad terrorista como proponen Yannarás , Clement y Kalómiros? Kalómiros propone que no existen ateos , que sólo son gente que odian al dios en que han sido enseñados a creer.
La Ortodoxia concuerda con que la gracia es un obsequio , pero un obsequio ofrecido a todos ,no sólo a un grupo selecto.
La gracia es una energía increada de Dios ,sosteniendo a toda la creación aparte de la cual no existe nada ( Salmo 104, 29) Además, aunque la gracia sostiene a la humanidad , la salvación no se puede forzar ni retener por decreto divino. Clement puntualiza que los “Padres griegos ( y algunos occidentales) , segun los cuales la creación de la humanidad conlleva un verdadero riesgo para Dios , pusieron énfasis en la salvación por medio del amor : Dios todo lo puede menos forzar que un hombre lo ame. El obsequio de la gracia salva, pero sólo en un encuentro de amor ( Clement, 1993 ,p.81) La teología ortodoxa mantiene que la gracia divina sólo opera junto con el albedrío humano.
PRACTICA PASTORAL ORIENTE Y OCCIDENTE
En terminos sencillos, se puede decir que la Iglesia oriental tiende hacía un modelo terapéutico que considera el pecado como enfermedad, mientras que la occidental tiende hacía un modelo jurídico que ve al pecado como un fallo moral. Para el primero ,la Iglesia es un hospital de almas , el ruedo de la salvación donde , por la gracia de Dios los fieles pasan de
“ gloria en gloria” ( 2 Cor. 3,18)
a la unión con Dios en un esfuerzo común de gracia y albedrío humano.
La oferta hecha a Eva y Adan sigue: ascender a la vida o descender a la corrupción. Para la segunda, sea que la Iglesia es considerada esencial , importante o arbitraria, el modelo del pecado como fallo moral se basa en la elección divina y adherencia a codigos morales y eticos como corrector del pecado y garante de fidelidad . Si es autoridad eclesial o conciencia individual que impone el codigo , el resultado es lo mismo.
Sin duda , el concepto de la salvación como proceso no es ausente en occidente. ( Uno puede recordar los místicos occidentales y el movimiento wesleyano por ejemplo .) A pesar de esto , los fundamentos teológicos subyacentes de las Iglesias oriental y occidental tocante al pecado ancestral o original siguen dramaticamente opuestos.
La distinción es obvia cuando se refiere al entendimiento mismo de la ética . Para la Iglesia occidental la etica parece implicar exclusivamente la adherencia a un codigo externo ; para la Iglesia oriental la etica implica
“la restauración de la vida a la plenitud de libertad y amor” (Yannarás , 1984 , p. 143)
La psicología moderna ha alentado a muchos médicos cristianos a ver el pecado como una enfermedad y por ende , el enfoque juridico se ha mitigado. La disposición de acudir a proveedores de servicios psicológicos cuando necesario implica ,en sí , una expansión de la definición del pecado de ser infracción moral a ser condición humana . Este es un avance feliz . El reconocimieto del pecado como enfermedad nos ayuda entender que el problema de la condición humana opera sobre muchos niveles y hasta puede contener un elemento genético .
Es notable que cristianos de un amplio espectro han redescubierto la psicología de los escritores espirituales , de la Iglesia antigua . Yo mismo la descubrí en un curso del Seminario de la Universidad Oral Roberts hace 25 años por la lectura de “ La Vida de Santa Pelagia la Ramera.” Mi viaje hacía la Ortodoxia y el sacerdocio comenzó allí. Estos pastores y maestros de la antigua Iglesia fueron inspirados por la perspectiva enunciado en este ensayo : La muerte como el problema , el pecado como enfermedad , la salvación como proceso y Cristo como Vencedor.
El pecado como un fallo al blanco , o dicho de otra forma , como un fallo de realizar el pleno potencial del don de la vida humana , nos llama a un desarrollo gradual del cargo pastoral . La meta es nada menos que una transformación existencíal desde adentro por medio de un incremento en la comunión con Dios . Los pecados de cada día son más que una infracción moral ; son revelaciones de la fragilidad de la vida humana y evidencia de una lucha personal .
“ El arrepentimiento significa rechazar la muerte y unirse a la vida” ( Yannarás , 1984, 147-148)
En la Ortodoxia solemos insistir en el proceso y la meta más que en el pecado . Un sagaz sacerdote ortodoxo serbio , en un entonces, comentó que Dios se preocupa más por el rumbo de nuestras vidas que por los específicos. De hecho , las Escrituras apuntan a la maravillosa verdad que,
“ Si guardas oh Dios los delitos, quien oh Señor podra subsistir pero eres indulgente” (Salmo 130 , 3-4)
El camino esta abierto para quien lo quiera emprender . A un joven monje se le preguntó,
“¿ Qué hacen todo el día en el monasterio.
Respondió,
“ Nos caemos y nos levantamos , nos caemos y nos lavantamos .”
El enfoque sacramental es una parte integral del cuidado pastoral en la Iglesia oriental.
La perspectiva terapéutica en la Iglesia ortodoxa libera el sacramento de confesión de la tendencia de adoptar un color jurídico que resulta en penitencias proscritas ,impersonales . En la Ortodoxia , los sacramentos aparecen como medios de revelar la verdad tanto sobre la humanidad que sobre Dios mismo (Yannarás , 1984, p. 143)Después del buatismo, a menudo fallamos en nuestro trabajo de manifestar la vocación de desenterrar la imagen dentro .
Setenta veces siete volvemos al sacramento no como una facil salida (confieso hoy, reincido mañana), sino porque la humildad es una dura lección para aprender , la transformación verdadera no es instantanea y estamos en necesidad del apoyo de Dios . El sanar toma tiempo . Los sacramentos estan lejos de ser rituales mágicos o automáticos .(Yannarás 1984 , p.144).
Son eventos personales y plenos de gracia en los cuales nuestra libre respuesta a la gracia divina es reconocida y sanctificada. Hasta en los circulos evangelicos donde la sacramentalidad de la confesión es rechazada sirve lo mismo la llamada al altar. Es revelador que la confesión en la Iglesia ortodoxa siempre se hace cara a cara y nunca en un confesionario como se hace en occidente. El pecado es personal y la curación tiene que ser igualmente personal .
Por ende , nada en el cuidado pastoral puede ser impersonal , automático o planeado por adelatado. En la Ortodoxia, la receta es confeccionada para el paciente como está y no como “debe” estar.
La perspectiva jurídica que ha prevalecido en occidente puede hacer la practica pastoral aparecer fria y automática . Ni un énfasis en las obras buenas ni en la fe sola son suficientes para transformar el corazón humano. ¿ Pueden los criterios positivos , externos significar una transformación interna en todos los casos? Algunas ramas de orientación cristiana se respaldan muy a menudo en la aplicación de aparentemente relevantes versos de la Escritura para efectuar cambios en comportamiento como si fuesen convencidos que la verdad de la Sagrada Escritura es suficiente. La creencia en la Escritura puede ser un comienzo , pero la verdadera transformación no depende sólo de pensar en ella.
Primero y ante todo se trata de una transformación existencial . Es un asunto de un cambio en el mismo modo de vivir : de la autonomía a la comunión . Permítanme explicar.
La muerte ha provocado un cambio en el modo en que nos relacionamos con Dios , con cada uno y con el mundo. Nuestras vidas son dominadas por la lucha por sobrevivir .
Yannarás escribe que nos vemos no como personas compartiendo una naturaleza y destino común sino como individuos autónomos que vivimos para sobrevivir cada uno en competencia con el otro . Así que , echados a la deriva por la muerte , estamos enajenados de Dios , de los otros y particularmente de nosotros mismos (Yannarás , 1984) . El Señor Jesucristo nos habla de eso , diciendo,
“ Pues, el que quiera salvar su vida , la perderá ; y el que pierda su vida por mí , la hallará” (Mat. 16,25)
La salvación es una transformación del tragico estado de enajenación y autonomía que termina en la muerte hacía un estado de comunión con Dios y con los demás que termina en la vida eterna . Tal que ,en la perspectiva ortodoxa , una transformación en el modo de vivir necesita ocurrir . Si los llamados son salvados por decreto y no por libre albedrío , tal énfasis es irelevante. Un juzgado aparece insuficiente para servir como un estadio de curación y transformación .
Se requiere una gran flexibilidad para el cuidado pastoral si se quiere promover transformación auténtica . Tenemos que aceptar a las personas como son y no como quisiéramos que fuesen . Codigos morales y eticos sirven de referencia, seguramente, pero no como fines en sí mismos.. Como un pastor , encargado con conocimiento de los detalles personales de feligreses, entiendo que mover alguien de punto A a punto Z es imposible . Si , por la gracia de Dios , se llega a punto B , verdadero progreso es posible.
Cada paso es un paso verdadero. Si logramos ser fieles en pequeñeces , el Señor nos dará luego , más grandes (Mat.25 ,21) . No deberá haber prisa en este proceso intimo de verdadera transformación que nunca termina . Como sacerdote y confesor les digo a los que vienen a mí,
“ No se con precisión lo que nos espera en esta aventura espiritual. Eso queda entre tú y Dios , pero si me permites , tomaremos el camino juntos.”
Un cura rumano se encontró oyendo por casualidad la confesión de un delincuente empedernido con un anciano hieromonje en una celda de una prisión comunista. Mientras oia , se dío cuenta de las lagrimas del hieromonje. No decía nada entre sus lagrimas hasta que el hombre había terminado y luego le respondió ,
“ Mi hijo , intenta enmendarte.”
Yannarás escribe que el mensaje de la Iglesia para la humanidad dañada y degradada por el “ Dios terrorista de etica jurídica” consiste precisamente en esto : Lo que pide Dios del hombre no son ni proezas individuales ni obras de mérito sino un grito de confianza y amor desde lo profundo “ (Yannarás 1984 , p.47). El grito viene de lo profundo de nuestra pobreza a lo insondable profundo del amor divino ; el hijo pródigo gritando “ ¡ Quiero regresar a casa! “ al Padre quien viendolo caminando de una lejanía corre a arrojásele al cuello. (Lc 15,11-32)
Lo que producirá esta relación divina/humana sólo Dios sabe , pero nos ponemos en sus amables manos y no sin alguna angustia porque
“ Dios es un fuego amable… para todos: tanto los buenos como los malos.” (Kalómiros, 1980 , p.19)
El entendimiento que la salvación es un proceso hace entendibles nuestros fracasos. La enfermedad que nos aflige requiere de acceso a la gracia divina a menudo y repetidamente . A Él , ofrecemos lo único que tenemos , nuestra endeble condición y voluntad. Junto con el amor y la gracia divinos , es el combustible alentado por el Espíritu de Dios , que prende fuego al alma.
Aba Lot fue a visitar al aba José y dijo : En cuanto me es permitido , practico una pequeña regla, un poco de ayuno , algo de oración y meditación , y mantengo tranquilidad y en cuanto me es posible mantengo mis pensamientos despejados.
¿Que más debo hacer? Luego se alzo el viejo y estiró sus manos al cielo , y sus dedos se hicieron como diez antorchas de fuego . Dijo:
“ Si quieres , puedes hacerte todo fuego.(Nomura , 2001, p. 92)
Como hemos visto , para los padres antiguos y para la Iglesia ortodoxa , la Expiación es mucho más que un ejercicio divino en jurisprudencia ; es el resultado de la vida, muerte y resurrección del Hijo de Dios que nos libera del pecado ancestral y de sus secuelas. Nuestro avasallamiento a la muerte, pecado corrupción y al diablo es destruido por la cruz y resurrección y nuestra inutil aventura en la autonomía se revela por lo que es : un callejon sin salida.
La salvación es mucho más que un fallo del alto ; es un proceso infinito de transformación de la autonomía a la comunión, un ascenso paulatino de gloria en gloria por el cual retomamos nuestra vocación original ahora realizado en Cristo. El camino hacía el arbol de la vida revelado a ser la cruz se reabre y sus frutos , el Cuerpo y la Sangre de Dios se ofrecen a todos .
El objetivo es mucho más grande que un cambio en comportamiento ; fuimos creados para hacernos divinos.
Por el P. Antony Hughes , rector de la Iglesia de Santa María ,en Cambridge ,Massachusetts y capellan ortodoxo en la Universidad Harvard.